La prueba comprobará el grado de dominio de las destrezas, capacidades y habilidades en expresión y comprensión oral y escrita, cálculo y resolución de problemas y el grado de adquisición de la competencia en comunicación lingüística y de la competencia matemática.
¿Cuándo y dónde se realiza la evaluación?
Está previsto que la prueba se realice en el mes de mayo. Tendrá lugar en los propios centros escolares.
¿Quién participa?
Todo el alumnado de tercero de Primaria.
¿Quién la lleva a cabo?
La prueba la realizan las propias administraciones educativas.
La corrección correrá a cargo de un grupo de docentes seleccionados.
¿En qué consiste?
Para la competencia lingüística se realizarán dos pruebas:
una de comprensión oral y escritay otra de expresión oral y escrita.
Para la competencia matemática se harán pruebas de cálculo y de resolución de problemas.
Las pruebas serán motivadoras y atractivas, incluirán:
Un caso práctico que incluya diferentes tipos de cuestiones (preguntas cerradas, de respuesta semiconstruida, de respuesta construida para el desarrollo de procedimientos y de respuesta abierta).
Podrá haber pruebas en papel y pruebas en formato digital.
¿Tiene alguna repercusión en las calificaciones?
No.El centro deberá actuar en consecuencia o poner en práctica medidas extraordinarias según los resultados obtenidos.
RECURSOS
Puedes encontrar más información sobre la evaluación en los siguientes enlaces:
Marco general. En este documento se explican los aspectos generales de la evaluación, qué se valora dentro de cada competencia, los criterios técnicos y de análisis de resultados o los informes, difusión y actuaciones que deben derivarse de ella.
Video resumen. Las claves de la evaluación, en formato entrevista.
El
libro sobre "La ciudad de los niños" es un experimento que
realizó Tonucci en las ciudades de Rosario, en Argentina. Este libro
pretende criticar a la forma en el que las ciudades están
estructuradas; por lo tanto aconseja que la ciudades sean
estructuradas y creadas pensando en los niños, en cierta medida
"protegidos" por el resto de la población. Tonucci se basa
en que la escuela debe de tener en cuenta las experiencias vividas de
los alumnos en su vida cotidiana y utilizarlo en clase. Otra base es
la utilización de estas experiencias para elaborar investigaciones y
“dar a luz” una respuesta que será aprendida mediante la
práctica. Estudia la sociedad y la critica con unos bocetos que lo
caracterizan; busca soluciones y las propone; algunas la lleva acabo
y otras intenta hacer razonar sobre ellas.
Como
pedagogo de gran relevancia Tonucci crítica la escuela actual y
propone varias modificaciones tanto en la escuela como en su forma de
trabajar. Sus ideas principales son;
Dejar
tiempo a los niños por las tardes para que hagan cosas diferentes y
luego tengan temas de conversación para hablar en clase. Esto
requiere no mandar demasiados deberes, ya que pasan suficiente
tiempo en el aula.
Darle
más poder y libertad a los niños; que éstos sean el centro de
formación contando sus experiencias. Tonucci defiende esta idea en
una entrevista publicada: “si los niños participan activamente en
la gestión y en la toma de decisiones escolares, como la
estipulación de las reglas que se aplicarán en los recreos, el
niño no se sentirá esclavo, sino un ciudadano libre y soberano,
uno de los objetivos que debe perseguir una escuela democrática”.
Tonucci
apoya el uso de la lectura en voz alta de los libros en clase.
Sostiene
que los niños no son recipientes vacíos que hay que llenar de
conocimientos; éstos tienen sus propias vivencias y formas de
pensar. Hay que escucharlos y crear entre todos el conocimiento.
También son capaces de mantener su concentración durante un buen
rato en un juego, pero esto no interesa a la escuela; porque no
ayuda a elaborar lógicamente los datos. Tonucci explica que en la
escuela se debe tener más en cuenta el divertimento.
Afirma
que si nos centramos en lo que se sabe hacer, mas que en lo que no
somos capaces de llevar a cabo, tendremos niños mas motivados y
menos frustrados que ayudarán a un futuro a crear personas más
seguras de si mismas.
El
profesorado de este tipo de escuela debe ser capaz de promover todas
estas ideas, apoyar el trabajo en grupo e incluir a la familia, la
cultura… en la escuela.
Hay
muchas más nociones sobre cómo debería de ser la escuela según
este autor, pero lo que está claro que la escuela debería crear
personas que fueran capaces de respetarse, ser individuales, libres,
tener sus propias opiniones, personas menos frustradas y más
decididas a formar sus capacidades. La escuela debería de ser más
abierta a las opiniones de los niños, crear el conocimiento entre
docentes y discentes… Estas ideas colaboran para crear una
ciudadanía más completa, competente y mucho más colaboradora en
muchos aspectos. Esta idea serviría para mejorar el hoy y crear un
futuro mejor.
Es
fundamental e imprescindible un cambio de modelo pedagógico,la
escuela tiene que reconocer las competencias de los niños, ya que
las desarrollan desde el momento mismo en que nacen. La educación
debe fomentar esos conocimientos, incentivar la curiosidad e
inquietudes para ayudar al niño a crecer sin perder su esencia que
lo hace tan particular y que es su habilidad para jugar y no
cansarse.
Tonucci,
F.
Tonucci
piensa que hay que resaltar el papel del maestro y considerarlo una
pieza esencial en la educación de los niños, ya que algunos niños
pasan más tiempo con los maestros que con sus propios padres a lo
largo del día, deberíamos potenciar más la relación entre la
familia y la escuela, la escuela tiene que ayudar a la familia en
aspectos en los que la familia no sepa cómo actuar. También
considera necesario un cambio de modelo: del educativo actual a otro
que tenga en cuenta las competencias del niño, hay que escucharlo y
conseguir que compartan sus conocimientos con los demás compañeros,
hay que prepararlo para la vida en sociedad. El
pedagogo dice que “la escuela tiene que estar ajustada a sus
necesidades, en la cual se haga más en menos tiempo. No puede ser
que tras seis horas de clase los niños lleguen a casa con deberes.
Los niños tienen que hacer cosas en casa, pero cosas que sepan hacer
ellos solos. Si todos los niños hacen las mismas actividades y ven
la misma tele luego en la escuela no tienen nada que contar a sus
compañeros”. Por
último, el especialista mantiene que “la escuela debe ser un lugar
bello, donde se pueda respirar cultura, haya música, arte, sea
agradable y cómoda. Debe preocuparse por ofrecer a todo el mundo
aquellas bases, aquellas motivaciones, aquellos modelos culturales
imprescindibles para construirse en patrimonio de conocimiento,
habilidades y competencias”.
"...
los maestros deberían aprovechar los momentos de libertad y juego de
los chicos para observarlos, ver los aspectos de su carácter y las
actitudes que normalmente en clase no se revelan. (...) no para
usarlas contra ellos, sino para conocerlos más".
"Los
chicos tienen que llegar a la escuela con los bolsillos llenos, no
vacíos, y sacar sus conocimientos para trabajarlos en el aula. (...)
El trabajo empieza dando la palabra a los niños. Primero se mueve el
niño; recién después el maestro. El maestro tiene que conocer lo
que saben los niños antes de actuar, porque si se procede antes,
seguro hace daño. (...) Si fueran escuchados, los niños podrían
llevar a la escuela su propio pensamiento. Lo normal es que un niño
que tiene una inteligencia práctica, hábil con las manos y que
puede desarmar un motor, para la escuela no vale nada. Vale sólo si
sabe elaborar lógicamente datos. Esa clasificación no tiene
sentido. Esa actitud selectiva, de que hay pocos lenguajes
importantes y de que los demás no valen nada, conducen al niño al
fracaso". "La
escuela utiliza la desconfianza y eso produce una evaluación
negativa basada en lo que el chico no sabe hacer. Apoyándose sobre
lo que sí sabe hacer bien, la escuela debería motivarlo a recuperar
y a ganar lo que no tiene como una conquista. (...) La escuela
transmisiva supone que el niño no sabe y va a la escuela a aprender,
mientras el maestro enseña a quien no sabe. Esa es una idea
infantil, que piensa al niño como un vaso vacío, mientras el
maestro vierte conocimientos que llenan al niño gradualmente. (...)
El niño sabe y es competente y va a la escuela para desarrollar su
saber". "La
escuela debe ser capaz de leer la realidad concreta que rodea al
niño. La geografía es la de su barrio; la historia, la de su
familia". "El
nacimiento de las democracias occidentales y el desarrollo industrial
exigen de la escuela una formación elemental, una alfabetización
masiva. Lo exigen porque, si la democracia significa gestión popular
del poder, cada ciudadano podrá participar en ella en la medida en
que se disponga de instrumentos para informarse, expresarse,
discutir". "La
escuela no cambia, continúa siendo de complemento, permanece la
selección aunque desplazada hacia los niveles superiores, los
institutos, las universidades y el trabajo; sube el porcentaje de
analfabetismo funcional, es decir, el número de los que nunca
utilizan los instrumentos culturales más elementales propuestos por
la escuela: la lectura y la escritura". "El
problema es más profundo y continúa latente bajo las diversas
formas estructurales y metodológicas: la escuela de todos no se ha
convertido en la escuela para todos". "Ahora
que todo el mundo va a la escuela son muchísimos menos los que
pueden encontrar en su familia las necesaria bases-modelos
culturales". "Una
escuela que quiera ser realmente una escuela de todos y para todos,
debe preocuparse por ofrecer a todo el mundo aquellas bases, aquellas
motivaciones, aquellos modelos culturales imprescindibles para
construirse un patrimonio de conocimientos, de habilidades, de
competencias". "Paradójicamente,
podríamos afirmar que tienen éxito en la escuela los que no la
necesitan. La escuela, que debería contribuir a introducir la
igualdad entre los ciudadanos, por el contrario alimenta las
diferencias". "En
la institución escolar no ha cambiado nada porque se ha dejado
completamente al margen de este proceso de transformación a los
profesores". "Nuestra
escuela hoy vive prácticamente en la "ilegalidad", en la
incapacidad de aplicar sus propias normativas y con el temor de que
aparezcan otras nuevas, aún más avanzadas". "Una
reforma real de la escuela debería nacer de los que trabajan en
ella, como exigencia de nuevos niveles profesionales, para la
construcción de los cuales deberían utilizarse todas las energías
actualmente disponibles". "Un
proyecto que mire hacia el futuro, hacia el siglo XXI, debería
examinar tres aspectos: a) El papel de la escuela y su relación con
la realidad del exterior; b) El método escolar: relación
enseñanza-aprendizaje; c) El docente: su función y su formación". "La
escuela asume el papel de entidad educativa por antonomasia, amplía
su duración y multiplica objetivos y actuaciones. Las familias piden
a la escuela que dé más y que compense las deficiencias familiares
y sociales. La escuela se convierte es un lugar de sociabilización,
de recuperación, de terapia..." "El
profesor no es el saber sino el mediador del saber". "La
escuela disfruta de la diversidad. Los puntos de vista distintos
constituyen el motor indispensable de la acción educativa: ponen de
manifiesto contrastes o contradicciones, solicitan comparaciones
progresivas y profundizaciones posteriores".
Aquí
tenemos su bibliografía:
•
Por
una Escuela Alternativa. Barcelona. Gux. 1978. •
Viaje
Alrededor de “El Mundo”. Barcelona. Laia. 1981. • La
Escuela como Investigación. Buenos Aires. Miño. 1988. • A
los tres Años se Investiga. Barcelona. 1988. •
Niño
se nace. Buenos Aires. REI Argentina 1988. • El
Primer año de nuestro niño. Buenos Aires. Miño y Dávila. 1989. •
Los
Materiales. Barcelona. 1990. •
Con
Ojos de Niño. Buenos aires. Barcanova Educación. 1990. Este libro,
refleja la realidad de las personas adultas, vista desde la
perspectiva de un niño. • Como ser niño. Buenos Aires. Buenos
Aires. REI Argentina. 1990. • La
Ciudad de los Niños. Barcelona. 1991. Trata de un proyecto
internacional de su mismo nombre, nacido en Faro (Italia), en mayo de
1991. Este proyecto propone soluciones a la degradación de las
ciudades, por privilegiar a los ciudadanos adultos, creando una nueva
filosofía de gobierno de ciudad, donde los niños sean el parámetro
a seguir y la garantía de una ciudad diversa y mejor para todos. Ha
ganado varios premios por este proyecto •
Las
Olimpiadas ´92 con ojos de niño. Buenos Aires. REI. 1992. •
¡Si
no os hacéis como yo! Madrid. PPC. 1995 •
Con
Ojos de Maestro. Buenos Aires. Troquel. 1996 •
¿Enseñar
o aprender? Caracas. Laboratorio Educativo. 1999. En este libro,
Tonucci plantea la investigación como una alternativa a la
enseñanza. En él, nos presenta ideas para que el profesor
desarrolle con los alumnos a modo de investigación y en donde relata
lo acontecido tras desarrollarlas. •
Cuando
los Niños dicen Basta!! 2005 Este es su último libro editado en
español, donde una vez más se sitúa en el lugar de los niños para
explicar, desde esa óptica infantil su filosofía sobre el proceso
enseñanza-aprendizaje.
Esta obra es considerada la primera película en español estrenada que fue financiada mediante un modelo de crowdfunding o Financiación en masa. Se destacó también por su modelo de proyección distribuido que permitió su estreno en simultáneo en 151 salas en 119 ciudades de 13 países en donde fue vista por más de 18.000 espectadores.